¿Cuál es tu mentalidad a la hora de salir a la montaña?

2 junio, 2023
BLOG

Los errores de factor humano son los más comunes en los accidentes en general. Desde varias especialidades se estudió como poder educar para minimizar su ocurrencia, la industria de la aviación, automovilística etc. Empezar a generar patrones para evitar fallas de comunicación o de toma de decisiones. En nuestra actividad seguro escucharon hablar de atajos mentales y problemas de heurística. Está vez vamos a hablar con qué mentalidad entramos al terreno de avalanchas.

¿Por qué tenes que tener un mindset planificado en terreno de avalanchas? 

Este concepto proviene de estudios realizados por psicólogos. Habla de básicamente dos tipos de mentalidades la fija o la progresiva cada una con sus pro y contras y cómo estas pueden afectar a la hora de tomar decisiones. Lo interesante de está traspolación para mitigar riesgos en terreno de avalanchas es la mentalidad que tenemos que tener a diferentes escenarios durante la temporada invernal.

¿Por qué?

La designación y asignación de mentalidades es útil como verificación para ver que todos/as estén en la misma página cuando hacemos una salida. La discusión sobre qué mentalidad se aplica a cada situación debe basarse en la evidencia y la incertidumbre. La evidencia se aplica a la cantidad de datos reales que tiene en el día y qué tan válidos pueden ser para la situación. La incertidumbre se aplica a los problemas de avalanchas con los que está lidiando y cómo el clima puede influir en el resultado durante el día.Para esto se trabajó en varias formas de poder mitigar estos problemas evaluando cada uno de estas formas de pensar a la hora de empezar a transitar terreno nevado.

Evaluación / apertura de terreno (orientaciones): Son momentos donde uno tiene grandes incertidumbres sobre las condiciones del manto, ya sea por ser la primera incursión en esa región y/o por falta de información luego de un evento particular.

ESTRATEGIA: Planificar terreno seguro donde moverse para recabar información extrapolable (terreno simple). Observar terreno desafiante o complejo, desde lejos, para identificar signos de inestabilidad. Consultar con expertos locales, boletines o cualquier fuente fiable de información.

Stepping out: Las condiciones están mejorando y/o estamos ganando confianza en nuestra evaluación. El Mindset “stepping out” (salir) cubre un rango desde salir muy con cautela a salir con confianza. Saliendo con cautela ocurre cuando hay una confianza limitada en extrapolación de las observaciones disponibles. Por ejemplo, cuando las inestabilidades de placa persistentes son cada vez más difíciles de gatillar, o para la etapa posterior a inestabilidades que deja una tormenta. “Stepping out” ocurre cuando uno está seguro de extrapolar a partir de las observaciones disponibles.

La comunicación con tu grupo es clave!

ESTRATEGIA: Tratar de entender qué problemas están ocurriendo en dichas zonas y poder  extrapolar la información para usarla en esta nuevas áreas. De todas maneras tenemos que ir con cautela tratando de identificar los mínimos signos de inestabilidad que puedan aparecer para reevaluar el plan.

Status quo: No hay cambios sustanciales en las condiciones o en la evaluación de peligros. La evidencia continúa respaldando nuestro plan  como antes y se ha alcanzado el nivel de comodidad para la exposición en estas condiciones.

ESTRATEGIA: No cambie nada y continúa como antes. Permanezca atento a los cambios sutiles en el clima y las condiciones del manto

Dar un paso atrás: La nueva información que teníamos según el pronóstico no es la que se muestra en terreno esto  genera incertidumbre sobre las condiciones actuales, ya sea por condiciones climáticas peores de las pronosticadas o por evidencia de inestabilidad de clase 1. 

ESTRATEGIA: La estrategia típica al dar un paso atrás es cerrar el terreno que se ha vuelto sospechoso en función de los cambios de la meteorología o la evidencia que crea incertidumbre. Stepping back puede planificarse a medida que aumenta la intensidad de la tormenta, o no planificarse, si el momento o la intensidad son inesperados. 

Atrincheramiento: Tratar con una inestabilidad persistente bien establecida. El atrincheramiento no es un modo de salir a esquiar o hacer splitboard  preferido y requiere disciplina para sostenerlo durante el tiempo necesario; este es el último recurso antes de cerrar el terreno  por completo. 

ESTRATEGIA: La reducción del riesgo de avalanchas se aplica metódicamente y está bien documentada. Cualquier cambio en las condiciones climáticas se evalúa por su impacto potencial en terrenos abiertos y cerrados. El terreno cerrado aún puede mitigarse durante estas condiciones si pueden impactar áreas abiertas. Las zonas seguras tradicionales pueden no ser apropiadas durante estas condiciones.

Analizar al grupo, las condiciones de inestabilidad y el terreno al que nos expondremos tiene que ser una charla recurrente en cada una de nuestras salidas.

Paseo libre: La evaluación de amenazas sugiere que sólo son posibles pequeñas avalanchas en características de terreno muy aisladas, y existe un alto grado de confianza en la evaluación de amenazas.

ESTRATEGIA: Se puede considerar cualquier terreno esquiable con la debida atención a la posibilidad de pequeñas avalanchas en la superficie. Las cargas manuales pequeñas y el “corte con esquís” son las principales herramientas de evaluación y mitigación durante estas condiciones. 

Primavera diurno: La evaluación del peligro sugiere que el único peligro sustancial proviene de las avalanchas sueltas húmedas durante la fase de deshielo de la tarde del ciclo diurno de congelación y descongelación. 

ESTRATEGIA: Estar atentos a la congelación adecuada durante la noche y considerar cerrar el terreno de avalancha durante la fase de descongelación del ciclo. El éxito de la mitigación depende en gran medida del tiempo y sincronización.

ENTONCES, QUÉDATE CON ESTO:

En está actividad el porcentaje más alto de accidentes es por errores de factor humano. Una forma de mitigar estos errores y aprender de ellos es tener un mindset a la hora de planificar. Debemos estar atentos a lo que estamos pensando y con qué mentalidad vamos a dar el siguiente paso en nuestra planificación para poder volver a casa sanos y salvos cada vez que salgamos. Dicen que se requieren unas 10.000 horas de experiencia en un entorno con feedback inmediato para llegar a dominar una habilidad compleja, y las avalanchas no son ninguna excepción. Diez mil horas son cinco horas por día durante seis años. Eso es mucho tiempo. Tengamos una actitud humilde y sepamos renunciar a nuestro itinerario si las condiciones no son lo que esperaba, una comunicación efectiva y la toma de decisiones acertadas son clave para cuidarnos a nosotros y a nuestros compañeros en terreno nevado. 

¡Nos leemos la próxima!
Jeremias Palavecino – BCP Team